En la búsqueda alma motora de alguna verdad subyacente de esta existencia, podríamos afirmar que hay dos formas de entender la perdurabilidad de la conciencia: el personalismo y el impersonalismo. Los Vedas aluden a esta compresión en toda su extensión desde el comienzo. El alma espiritual opta por identificarse, según las tendencias cultivadas a través de sus propias inquietudes existenciales( janma- karma ca me divyam). Su grado de conciencia evoluciona hacia alguna concepción. Ya sea que el alma se conciba como una chispa total de todo, o se perciba en relación directa con eternas formas personales, estas realidades coexisten, esta forma de ver la realidad trascendental, tambien es un punto de vista. Y en todo caso siempre se esta hablando del "parabrahman", o verdad conciente absoluta. Los impersonalistas no pueden aceptar las formas, por que dicen que son producto del mundo material finito, mientras los personalistas saben que la verdad suprema no tiene forma temporal. En todo caso ellos están detectando algo que esta más allá de la realidad material temporal. Mas, el personalismo tiene la ventaja en la amplitud de su concepción, sobre los impersonalistas y es que ellos aceptan la visión personal como impersonal. Los impersonalistas no pueden aceptar la forma personal. En el Gitopanisad, Krsna se describe como el fundamento del brahmán impersonal (BG 14. 7). Esta realidad personal es apreciable mediante una comparación de percepción (pratyaksha). Si uno ve solo la luz de sol, solo percibe como realidad la luz de sol. Si uno descubre la fuente de la luz, uno ve el origen de la luz del sol. La interpretación de la verdad, no es algo cerrado, es una cuestión de punto de vista. En otros pasajes de escrituras como el Isopanisad se dinamiza este discernimiento amplificador entre lo personal e impersonal: el camina y no camina, esta dentro pero sin embargo esta fuera (ISO mantra 5). Esto hace entender a sus potencias inconcebibles y da lugar a entender que por eso hay una persona supraconciente detrás de todo. Por eso los Vedas, no llevan a realidades conclusivas como las construidas por la logica del mundo material finito.
Ernesto Baca cayendo del mundo espiritual.
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